El desafío al que
todos nos enfrentamos en la vida es ser quiénes realmente somos,
sin importar quiénes estén con nosotros. En diferentes momentos de nuestras
vidas, nos encontraremos en presencia de personas que están cerradas o
abiertas, o que proyectan cosas sobre nosotros.¿Cómo podemos ser nosotros
mismos con estas personas?
Es
el mismo tipo de desafío que cuando intentamos estar quietos y meditar en un
lugar abarrotado. ¿Cómo podemos ser nosotros mismos y centrarnos cuando hay
todo ese ruido a nuestro alrededor? Siempre sé que estoy teniendo un día
horrible cuando dejo que el ruido me afecte. En ese momento, digo: “Sí, puedo
sentir que la ira crece dentro de mí ahora”. En días como ese, permito que el
ambiente dispare diferentes cosas dentro de mí y, a veces, estoy agradecida
porque me doy cuenta de que necesito abordar algo.
Muchos problemas
de relaciones son la evidencia externa de problemas internos no resueltos.
Siempre es más fácil culpar a alguien más que enfrentarnos a nosotros mismos,
pero así nunca llegamos a la fuente real del problema.
Por eso,
centrémonos en lo externo por un momento. Y pregúntate lo siguiente:
¿Cuáles dirías que son los principales sentimientos
provocados por losconflictos
con el hombre o la mujer en tu vida?
Respuestas posibles: Desconfianza, indignidad, control, separación o
desconexión.
Estos
problemas pueden formar parte de cualquier relación, aunque en las románticas
suelen ser los más intensos. En cualquier relación es importante recordar que
los conflictos que tienes con la otra persona no son culpa o responsabilidad
de esta. Son tus propias acciones, y de alguna manera estás atrayendo
esos problemas hacia ti mismo.
Así que ahora
pregúntate:
¿Qué estás buscando fuera de ti? ¿Qué puedes hacer
para ayudar
a sanar esa parte de ti mismo?
Respuestas posibles: Establecer límites,
crear aceptación, libertad y paz.
Cualquier tipo de
conflicto que tengas con una pareja romántica proviene de una herida interna de
separación, desde la cual proyectas la sombra de tu propio
hombre o mujer sobre la otra persona. Buscas la fuente de la verdadera
unión fuera de ti y te enfocas en la unión con la otra persona, cuando la
verdadera unión solo puede suceder dentro. Solo una vez que hayas encontrado
este sentido de unión dentro de ti mismo, podrás compartirlo con otra persona.
Y compartir el amor también se convertirá en una cosa diferente
a regalarlo. Regalar, perderte por otra persona significa que has
abandonado tus límites y tu centro. De hecho, el amor real significa estar
completamente presente y mantener tu propio espacio. Entonces, desde ese lugar
de empoderamiento, puedes verdaderamente compartir el amor dejándolo fluir.